Mejorar tu cuerpo cuidando lo que comes.

Ahora que llega el verano y queremos lucir un cuerpo espectacular, debemos cuidar nuestra alimentación y realizar una actividad deportiva de forma regular, pero no sirve de nada ir al gimnasio una semana y tres no, debemos realizar ejercicios para mejorar nuestro cuerpo, de forma regular si queremos conseguir resultados.

Si estamos decididos a mejorar nuestro cuerpo, lo primero que tenemos que mejorar es nuestra dieta ya que si nuestra dieta es pobre, nuestro cuerpo no tardará en mostrar debilidad.

Una dieta equilibrada será imprescindible para suministrar la energía necesaria que necesitan nuestros músculos, así como todos los nutrientes esenciales.

Existen diferentes tipos de alimentos según su función:

1. Alimentos que ayudan a formar tejidos como las proteínas:

El queso, la leche, el yogur, los huevos y la carne.

2. Alimentos donde predominan las vitaminas y los minerales:

Todas las verduras de hoja verde, las hortalizas y las frutas.

3. Alimentos que producen energía. Hidratos de carbono.

Los cereales que contiene la pasta o el pan. También son alimentos energéticos aquellos que contienen grasas como: el aceite o la mantequilla.

Pues bien, una vez conocemos a grandes rasgos los diferentes grupos de alimentos, hay que tener en cuenta que una dieta saludable no puede estar formada únicamente por alimentos de un único grupo, sino de todos y cada uno de los grupos, eso sí algunos grupos de alimentos deberán estar más presentes en nuestra dieta diaria que otros, como por ejemplo las frutas y verduras frente a las grasas, que deberán consumirse de forma esporádica.

Por otra parte si queremos aumentar nuestra actividad física, deberemos aumentar el consumo de alimentos que nos proporcionen energía, pero por el contrario, si nuestra vida es bastante sedentaria no deberemos abusar de ellos, ya que no llegaremos a consumir esa energía y se almacenará en nuestro organismo en forma de grasa.

Si queremos mejorar nuestra salud y también nuestro cuerpo tendremos que tener en cuenta los aspectos citados anteriormente en nuestra alimentación, sin olvidar que practicar una actividad física de forma regular también contribuirá a ello.